La costumbre de vivir
nos detiene
en cualquier sitio
Que más da
un grito más
si la noche entera
se abrió como una rosa
sin pliegues
y la lluvia
se nos muere
entre las manos

Mil voces
cruzan este silencio
desplegando
palabras de sed
palabras devueltas
palabras solas
de tanto usarlas
sin comprender
como articular
este verso vertebrado
sin comprender
como atrapar
esas palabras excesivas
que suenan el aire
sin retorno
y definitivamente
callan

Estas palabras
son viento de regreso
Una pausa
para recuperar
mi primer rostro
en esta memoria incompleta
Para retener
el amor unánime
de los que tienen mi sangre
Para recobrar
los deseos aplazados
la ingenuidad constante
Me absuelve tanta distancia
Hasta el cuerpo
se me vuelve recuerdo
Mi tiempo es un exorcismo

Permanecemos
en el exacto minuto
de un tiempo disecado
entre dos eternidades
Un instante consciente
entre la memoria
y la esperanza
Un sitio de luna agonizante
quebrando la noche excesiva

La noche
se disuelve en tu cabello
Una historia de sangre
enciende la piel apasionada
dicta una tragedia sin testigos
una culpa anterior al crimen
El misterio
permanece en el abismo
Las cortinas respiran
con tu insomnio
Las ventanas te preservan
un encierro voluntario
En tus ojos
se apresura la tormenta

En la mitad de la noche
me tomo el pulso
para sentirme vivo
Me crece el miedo
de quedar dormido
de ser víctima de tu pesadilla
Voy a recuperar la pausa usada
los espirales nocturnos de tu pelo
En un sueño antiguo
me encontrarás
suspendido en la noche
meciéndome despacio
colgado de la luna

Dónde quedó
el mármol de los altares
la fiebre infantil
los juegos desvelados
los miedos precipitados
Dónde quedó
el invierno de piedra
la luz ebria durmiendo
detrás del horizonte
la lluvia constante
equivocando las huellas
el viento que se inventa
y se repliega
que desnuda los árboles helados
Ahora todo sabe a mentira
De este lado
el cielo se incendia
como todos los días
con un sol innumerable
que se expande
perseverante
sin motivo aparente
Tantas formas de morir

Afuera la noche se dispara
acribillando estrellas acróbatas
Abandonado por la luna
desaparezco en los lienzos
que pinté ayer cuando dormías
Soy el personaje que se esconde
en un pliegue transparente de tu piel
esperando
que yo lo dejo de soñar
Esperando
que Dios me deje de soñar

Estoy desnudo
náufrago de otra orilla
Estoy desnudo
con el alma vestida
disfrazada de otro hombre
al otro lado de la sombra

Hoy en el insomnio de todos los días
te escribo una carta sin destino
en la geometría de una palabra
atrapada en los espejos
La primera palabra
abandonada
en el basurero de la historia
La palabra quebrada
con el ruido gastado
La palabra y su sombra
La palabra escapada
con el primer aullido del mundo
Árbol abecedario
tatuado en tu piel
con forma de poema
que nace como el día
y muere en una playa perdida
sobre tus ojos de arena

Se disparan
las estrellas
La noche se desborda
y la casa está llena de luna
Mi oficio nocturno insiste
en exterminar recuerdos
Un combate sin alternativas
Un intento apresurado
por rescatar
las voces perdidas

La vida se nos acuesta
así toda llena de ausencia
de sol furioso
enraizando el desierto
gastando las piedras
acribillando ángeles perdidos

Aquí la noche
se hace hábito
Despierta los instintos
de erecciones vegetales
Se extiende
la memoria universal
como la euforia
Un escondite
sin alternativas

Soy
el desencotrado
escribo como el viento
en el primer bostezo del día
con manos cautivas de sueño
con sabor a sexo
en los labios
más irreal que los fantasmas
más mi sombra que mi carne
Profeta del mutismo
enterrador de infancia
extraña encrucijada
de monstruos y ángeles
Soy
un poeta en la niebla
inmerso en la palabra extinta
lamiendo ausencias
buscándole el alma a las cosas
la última instancia
la impaciencia

En esta noche
invadida de verano
se refugia la muerte
llena de metal y trinchera
Es el límite violento
la última bala suicida
La tierra se alimenta de féretros
la lluvia se viste de óxido
casi
soy la cicatriz
de un tiempo exhausto

Ahora
más que nunca
un sentimiento compartido
envuelve la noche
nos protege de la realidad constante
de los enamorados sumisos
de los amantes resignados
de los marginados del erotismo
Se anudan tu voz y la mía
para entender
esa costumbre de miedo
Dame
los hilos de la lluvia
vamos
amarremos la vida

Despierta
una historia urgente
cruzando tus calles de viento
rompiendo con furia
los vértices de la noche
Derrotados
llenos de ausencia
viviendo desalojados
un rito voluptuoso

Instalo en los papeles
las mentiras de este día
Deshojo la constancia
de hacerlos volar
Remontan el verano
vestidos de luciérnagas
fecundan este paisaje
perfumado de fiebre

La misma derrota
ya no hay pactos
en este tiempo disfrazado
de animales oscuros
de asesinos innumerables
de podar tus cabellos verdes
por una guerra necesaria
para inaugurar
otra luz

Se anuncia el desafío
de recobrarnos
cómplices permanentes
La vida anda suelta
jugando con armas secretas
Un experto en muertes
la reclama

Sobrevivientes
de ruinas imposibles
Llevamos en los pies
restos de la noche
Arquitectos de la oscuridad
testigos inmortales
sin residencia

La noche
es una animal dormido
con espinas como luces
Los ídolos despiertan
de un sueño imaginario
Aquí
sospechamos el espacio
de enterrar estrellas
inventamos la esperanza
aprendemos del temor
Los nombres del miedo
no son el miedo

En la misma noche
se respira la distancia
así
con los ojos cerrados
y las manos sorprendidas
Un abismo irresistible
divino y oscuro
como una promesa
para deshacer la muerte

La rebelión se desata
una amenaza insiste
en conjurar venganzas
Una conspiración
se excede
Territorio habilitado para morir
Como pétalos
se mudan los cuerpos
de sus pieles
La permanencia
es un espacio de miedo
La libertad reza
una plegaria de prostíbulos
Me duele la vida aparente
de los olvidados del destino
Reclamo las heridas
de los obedientes
Presumo la demencia
de los atrevidos

El sol está de fiesta
Una aventura surrealista
de pájaros excéntricos
me traen las promesas del día
Una tertulia de insectos
asombrando los vegetales
Un encuentro inmenso
primitivo
y yo juntando los límites
para bordear la noche

El enemigo
vive en secreto
donde se rompe
un viento imposible
El enemigo
se baña
en la sangre del mundo
Levanta
soledades como gritos
Desafía
los sueños de los inocentes
Grita
una premonición perversa
El enemigo
encadena la libertad
al destino breve
ejecuta la esperanza
El enemigo
ha perdido su nombre
Nos habita

Todo comienza
y muere
el aire extingue
catedrales de ceniza
Todo comienza allí
como el impulso suicida
Otra vez la sangre
impone el equilibrio
reaunuda el laberinto
las rutas espirales
el antes o después
nacer de muerte
morir de nacimiento

Hijo

Me resucita cada día recordarte
Saber que eres
el habitante más real
de mi existencia
Aquí escondido
detrás de las palabras
espero que te acerques
para fundirte en mi pecho
para que aprendas a ver
desde mis ojos
para que sientas
con mis sentidos
para que te veas a ti mismo
interrogándome en silencio
Quisiera descifrarte la vida
Inventarte un cielo de día
Un pedazo de sol siempre brillante
recortando mi sombra entre tus pasos
Porque yo no he muerto
Aun camino sobre tus huellas
En las noches soy un personaje
escondido en tus sueños
En las mañanas te veo sonreir en mi espejo
En los dias te escribo
páginas como alas
Te llevo debajo de la piel
Eres la caricia profunda
que madura cada día
Perdóname la ausencia
Soy un violador de ceremonias

La noche se manifiesta
con un perfil unánime
Reconozco la consigna
Sujeto el huracán
entre los dientes
Anticipo los instantes
la rendición
el duelo
el combate
en otro cuerpo
cabalgando
el lomo verde
de la zona alucinada
La esperanza

Detén la noche
un espíritu de vértigo
ensaya la acrobacia
de sujetarse a la vida

La noche es absoluta
Un pacto con las sombras
para morirnos otra vez
Llego sin comprender
donde cuelgo tanto infinito

El destino se tensa
en las esquinas
reconozco los pasos
que aún no he caminado
La rebelión de mi sombra
Los combates con mi cuerpo
La identidad perdida
Muere cada día
una parte de mi
que no es mía
El crimen perfecto

En la noche detenida
despierta el sobresalto
La ciudad ahogada
no tiene límites
para colgar los pasos
Un horizonte abandonado
una superficie sin salida
un viento vertical
que se fuga

En la ciudad
cuelga la ceniza
definitivamente
una geografía de cicatrices
los héroes
han perdido sus nombres
vestidos de sangre
rompiendo el viento de metralla
dejan en alguna parte
la muerte creciendo en el asfalto
definitivamente

Una historia
se descuelga en los balcones
la red que nos une
los unos con los otros
La ciudad me absuelve
Vuelvo en mí
Me vigilo

Ensayas
tempestades
en esta zona muerta
de balcones hambrientos
de puentes breves
de cemento amargo
de confesionarios transparentes
de campanas de piedra
tañendo por la tregua
de persuadir al día
a que no se apague

El odio se resbala
en cada esquina
Este escenario
de avisos iluminados
esconde la ecuación sensual
lleva el grito de bronce y neón
cantando por las avenidas
siembra las trampas
en este paisaje con serpientes
Señales que se instalan sin permiso
y un viento que se hunde
acelera la estrategia
el disparo final
la muerte imaginaria

La espera se niega
se agolpa la llovizna
en las ventanas desiertas
Extintos
pueblos de hierro
oxidan la esperanza
alquimia perversa
exactamente
las razones del miedo

Un abandono sin destino
se destila en estas calles
La vida intensa y
la muerte tensa
juegan en un circo
de cemento
Un desencuentro constante
me ata al destino
de esta gente diluida
de estos seres que son otros
siempre
todos ellos son otros
esgrimiendo emblemas de humo

Un instante eterno
me demora
atravesando estas calles
de niebla
Me escapo
de las miradas desoladas
de las miradas de los otros
Presumo la locura
en los ojos de todos ellos
La ciudad es un templo blasfemo
sumergido en la noche

Algo andrógino se confunde
en las calles circulares
Se transforman
en la noche clandestina
Se repiten
Se desdoblan
Llevan un discurso
de sexo en la piel
un ensayo trágico
una oración impura
un himno rebelde
proclama sus derrotas

Una costumbre erótica
me obsesiona
Determina mi andar demorado
por estas calles de fuego
por estas calles de hielo
Un intento sonámbulo
de descifrar la clave
de tu eclipse de medianoche

La calle
está manchada de furia
Una soledad indomable
se abre paso
derribando fronteras
Una soledad indomable
muerde la noche
en secreto

Una muerte espesa
se extiende en las veredas
Rostros intensos
violan mis espacios mágicos
La ciudad se alimenta
del esperma clandestino
de los reincidentes
Los héroes contrapuestos
inventaron el caos
Todos ellos inventaron
una costumbre de duelo

La ciudad rabiosa
esconde sus luces
en la noche
de ojos suicidas
en las avenidas crepusculares
derritiendo las máscaras
de los soberbios
modelando lunas de yeso
Después de la tormenta
quedan los ángeles fluorescentes
alumbrando la catedral
besando el cadáver nocturno